Siles 2011
Fecha: 12 a 15 de mayo 2011
Iniciando lo que
pretendemos que sea una salida anual del grupo de los polissons, José Antonio de
"Goma Treking" nos ha preparado este año un interesante viaje a la provincia de
Jaén. Como "campo base" recalamos en el camping del Rio los Molinos de Siles.
Este pueblo se encuentra al norte de la provincia y prácticamente es la puerta
de entrada al Parque Natural conformado por las sierras de Segura, Cazorla y las
Villas.
El primer día después de "tomar" el campo base, visitamos el nacimiento del río
Mundo. Aunque ya en la provincia de Albacete, se encuentra a pocos kilómetros de
Siles. Es un paseo agradable de poco más de media hora, con unas vistas
excepcionales de la cascada que nace en la Cueva de los Chorros.
El segundo día José Antonio nos guió por una interesante ruta por el monte
Poyatos de las Collejas en la misma zona de Siles. Ruta que todos íbamos
disfrutando hasta la cuesta del final. Trescientos metros de desnivel en una
distancia de un kilómetro nos dejó a más de uno "tocao", después de llevar casi
doce kilómetros a la espalda.
El tercer día nos decidimos por lo que a priori tenía que ser un paseo. Yo, como
responsable de buscar la información para realizar esta ruta, busqué información
-como no podía ser de otro modo- en Internet. Saqué información de dos páginas
distintas y ambas coincidían en la distancia, 11 kilómetros de ida, y un
desnivel de 80 metros. Iniciamos la ruta convencidos -yo también- de que sería
un paseo. Pues nada más lejos de la realidad. Al llegar a la central eléctrica
llevábamos casi doscientos metros de desnivel. Hasta el nacimiento del río
Borosa fueron 800 metros de desnivel lo que marcó el GPS. La distancia total
fueron 23 km. Como paseo, no está nada mal.
El cuarto día lo aprovechamos para visitar el centro de Siles y su museo para
comprar algún recuerdo. Aunque el mejor recuerdo que he traído han sido los
buenos momentos que he pasado en este viaje, con estos maravillosos "Polissons".
Respetemos siempre la Naturaleza, respetemos la propiedad privada y no dejemos en la montaña ningún rastro de nuestro paso.