Pla de Sobremunt, por los pasos d'en Teret y des Mestre

21-ene-2013+ ficha- fichaVer trackGalería de fotos En octubre del año pasado publiqué la ruta del Pas de na Lluïsa, por el que se accede al Pla de Sobremunt. Esta ruta tiene problemas de paso al final del camino de Son Puig, que acaba frente a la barrera de una casa, con un algarrobo a la izquierda y, también a la izquierda, otra barrera más pequeña y más vieja.
Pep Torrens, me envió una alternativa para llegar al Coll Paredat, previo al Pas de na Lluïsa, sin problemas de paso y bastante más corta. Se sube desde la carretera de Puigpunyent a Esporles, cerca del Coll des Grau.
Nos gustó tanto la alternativa que, en lugar de emplearla únicamente para subir directamente al Pas de na Lluïsa, la hicimos tal y como la relata el amigo Pep Torrens.
Una vez publicada la ruta, mi amigo Joan Miquel, me ha comentado que un payés le habló de este paso como Pas des Colls. Tiene lógica este otro topónimo, ya que por él se accede a una zona con numerosos colls de tords.
Empezamos dejando el coche junto al kilómetro 4,9 de la carretera Ma-1101, a la que nosotros accedemos desde la parte de Esporles. El desvío a esta carretera está junto a Sa Granja d’Esporles.
Al dejar el coche, caminamos unos doscientos metros en dirección a Esporles, hasta encontrar el Pou del Pla de Baix, cubierto, junto a un portillo con barrera (3’). Seguimos por la amplia pista de tierra del otro lado de la barrera, que a los 4’ la encontraremos con las zonas de rodadura hormigonadas. A la derecha vemos un tramo del camino viejo sobre unas paredes de sostenimiento y un puentecillo, pero continuamos por nuestra pista, ya que se juntan poco más arriba. Llegamos a una curva cerrada a la izquierda (2’), y en el margen derecha hay una fila de piedras que cierra la curva y donde arranca un senderillo hacia la derecha, dirección Sur, que es por donde continuamos.
Este senderillo de dirige hacia una zona arbolada y hacia una pared con un portillo con barrera de madera (2’). Al otro lado del portillo el sendero no se ve tan claro, pero seguimos de frente, ligeramente hacia la izquierda, hasta encontrar un nuevo portillo (3’), esta vez sin barrera, en el ángulo que conforman la pared de la izquierda y el bancal de enfrente. Pasamos el portillo y vamos dirección Este hasta encontrar un camino de carro, que hacia la derecha, Sur, nos llevará hasta unos aljibes (6’).
Sin pasar los aljibes, giramos a la izquierda y vamos superando los bancales por los puntos más evidentes, con ligera tendencia hacia la derecha, hasta llegar a una zona de rocas, a la derecha, donde vemos que los bancales y la pista que los atraviesa van, dirección Sureste, hacia el amplio Coll Paredat (7’), cerrado con una pared con rejilla.
Aquí encontramos dos portillos, uno a la izquierda y otro más centrado, cerrado parcialmente con palos y rejilla. Pasamos por éste último y vamos un poco a la izquierda para encontrar el camino que parte detrás de una roca, dirección Sureste. En 2’ llegamos a una bifurcación con una curva cerrada a la izquierda. Nosotros seguimos recto, pasando junto al viejo y derruido portillo de Sa Vinya y los restos de una barraca. Siguiendo este claro camino, con muy poco desnivel, llegamos a una zona ombría con una pared de partío y portillo con barrera (7’). Al otro lado encontramos un amplio collado y antigua zona de cultivo con una alta pared de piedra a la derecha. Continuando por la amplia pista, en la misma dirección que llevábamos, llegamos hasta la pared exterior de la casa de s’Hort des Pouet (3’).
A la izquierda, frente a la puerta de entrada, arranca un viejo camino de carbonero, que va hacia la derecha, dirección Noreste. Este camino lo abandonamos por la izquierda a los 3’, en el punto donde encontramos un hito y una flecha roja en una encina. Aquí arranca un senderillo, que seguimos prácticamente en la misma dirección hasta pasar una baja pared de piedra por un portillo sin barrera (2’), que da acceso a una amplia torrentera, con restos de actividad carbonera. Vamos hacia la izquierda en claro ascenso por el centro de la torrentera, hasta encontrarnos las paredes que nos cierran el paso (3’).
En esta zona a la izquierda, marcado con hitos y flechas rojas, se encuentra el inicio del Pas d’en Teret. Se trata de un paso corto, pero muy vertical, no recomendable a senderistas con poca experiencia, y menos en mojado como lo encontramos nosotros.
Una primera grimpada, nos sitúa en la entrada de una pequeña cueva. Después continúa por la izquierda, también marcado con flecha roja, con un tramo bastante vertical. Aquí encontramos como ayuda un estribo metálico –ojo que se mueve un poco- y una argolla con buen agarre para la mano, que se agradece bastante. El siguiente tramo es hacia la derecha y se pasa una corta repisa con unas rocas a la izquierda que “empujan” hacia el vacío. Tardamos 10’ en superar el paso y a la salida ya encontramos hitos y flechas que nos conducen en oblicuo a la izquierda hasta encontrar una baja pared de piedra entre dos “colls de tords” y con un cartel de coto de caza boja abajo, clavado en un árbol (5’).
Al otro lado de la pared seguimos los hitos y las flechas rojas que nos conducen por el Pla de Sobremunt, dirección Noroeste, hacia la parte alta del Pas de na Lluïsa. A los 12’, antes de llegar a los acantilados, giramos a la derecha, para andar paralelos a éstos, llevándolos siempre a la izquierda. Pasamos por varias sitjas y barracas, hasta encontrar un horno de pan con la boca muy baja (8’). A la izquierda de este horno encontramos unas marcas de pintura y flechas, que nos conducen hacia un estrecho camino en bajada que nos dejará frente a una sitja. Antes de la sitja, en el suelo, hay una flecha roja, que hacia la izquierda nos marca un sendero, que en ligera subida nos hará pasar por un bajo bancal (2’) junto a dos “colls de tords”. Seguimos dirección Norte, pasamos sobre otra sitja (7’) y seguimos en la misma dirección hasta encontrar las flechas rojas que nos indican la bajada a la izquierda hacia el Pas des Mestre (3’), una de ellas en una piedra no fácil de ver.
A mi modo de ver, este paso tiene dos partes diferenciadas. Una primera que nos lleva por un corto camino sobre unas rocas hasta una sitja en un pequeño collado (3’), donde giramos a la izquierda. La segunda, es la parte que al girar a la izquierda nos introduce en una estrecha canal, donde el camino se aguanta sobre una preciosa pared de sostenimiento y pasa por un portillo sin barrera (1’). Al salir de la canal, ahora ya sin hitos ni flechas, vamos ligeramente hacia la izquierda, en clara bajada, hasta encontrar una pequeña balsa artificial (6’). A la derecha de la balsa, poco más abajo, hay una pared con un portillo cerrado con una barrera metálica. Pasamos la barrera y continuamos hacia la derecha entre los bancales hasta encontrar una pared de piedra con rejilla que nos cierra el paso (5’). No pasamos la pared, sino que vamos a la izquierda, paralelos a ésta, hasta encontrar un gran pino caído, parcialmente troceado (2’). Pasamos junto al pino y seguimos el camino de bajada entre los bancales, ligeramente hacia la derecha, dirección Suroeste básicamente, hasta llegar a las abandonadas casas de Cas Mestre (6’).
Desde Cas Mestre, seguimos el camino de bajada que en 1’ nos dejará en una amplia pista. Esta pista hacia la derecha nos conduciría hasta Can Ximenea, pero nosotros la tomamos hacia la izquierda. Pasamos junto a las también abandonadas casas de Can Noguereta (3’) y poco más abajo volvemos a pasar por la curva (3’) donde a primera hora de la mañana habíamos abandonado la pista, cerrando la parte circular de la ruta de hoy.
Ahora no queda más que seguir la pista hasta la barrera junto al pozo (5’) y después por la carretera hasta el coche (4’).