Puig de ses Vinyes por la cresta, desde el mirador de Cúber

22-nov-2012+ ficha- fichaVer trackGalería de fotos En diciembre de 2011 ya realizamos una ruta parecida a esta, pero no hicimos la cresta desde el inicio. En esta ocasión queremos hacer toda la cresta, partiendo del mirador de Cúber.
Nos es una ruta recomendable si se padece vértigo o se tiene algo de miedo a las alturas. De todos modos, si iniciada la cresta nos viésemos apurados, hay varios puntos de escapatoria antes de iniciar la parte más complicada.
Dejamos los coches en el mirador de Cúber –no caben más de dos o tres-, y bajamos unos metros por la carretera, hasta una señal de estrechamiento de calzada (2’). Aquí, a la izquierda, hay un hito de piedras sobre las rocas que indica el punto donde abandonamos la carretera.
Seguimos los hitos en oblicuo a nuestra derecha, dirección Noreste, que nos llevan claramente hacia la cresta. Una vez en la cresta (11’), seguimos los hitos que nos ayudan a evitar las partes más conflictivas, ya que se trata de una zona con formaciones kársticas donde no es nada fácil avanzar.
La subida hasta la cima, a mi modo de ver, tiene dos puntos que merecen una especial atención.
Uno es un paso en descenso entre dos rocas cimeras, entre el Puig de sa Plana (996m.) y la rejilla en la cresta (80’ desde el inicio de la cresta), que imagino delimita los terrenos de Turixant. En esta ocasión lo encontramos húmedo y al no disponer de muchos agarres, optamos por rodearlo por la izquierda bajando un poco, para volver a subir enseguida hasta la rejilla.
El otro, es la roca que conforma una pared vertical (23’ desde la rejilla), que encontramos poco antes de la cima y que superamos por una grieta ascendente, de izquierda a derecha, con un inicio bastante vertical.
El resto no tiene más complicación que intentar avanzar, siempre que se pueda, por la parte más alta de la cresta, hasta la cima (7’ desde el paso anterior). En ésta encontramos un hito, un belén metálico y un libro resguardado de las inclemencias del tiempo, donde podemos dejar escrito un comentario de nuestro paso por el Puig de ses Vinyes.
La bajada la realizamos por la cara Norte. Desde la cima, avanzamos unos metros en el mismo sentido de subida, hasta encontrar a la izquierda los hitos que nos irán marcando la bajada más fácil por esa ladera. Encontramos un tenue senderillo en la misma dirección, Suroeste, que nos lleva hasta una escalerilla metálica que salva una rejilla (16’).
Continuamos en la misma dirección guiándonos por los escasos hitos, entre rocas y carrizos, hasta encontrar otra escalerilla que salva una nueva rejilla (16’) y que nos deja en la entrada del pinar. Enseguida encontramos una pista, que sin dejarla, a pesar del par de revueltas que hace, nos deja junto a una nueva escalerilla, para salvar la barrera de una pared medianera (13’).
Superada la barrera, seguimos los hitos, ahora sin camino, que nos irán derivando poco a poco hacia la izquierda, en suave subida, para ir adentrándonos en la suave vaguada que acaba en la carretera (16’), donde a pocos metros a la derecha, tenemos los coches (2’), dando así por concluida la ruta de hoy.